El Bachillerato es una etapa crucial en la vida de todas las personas que decidís tomar este rumbo. Es un momento de crecimiento personal en el que aumentan vuestras ambiciones y vuestro deseo de independencia y de autosuficiencia.
A nivel académico, esta etapa os prepara para la prueba de acceso a la universidad y requiere de un esfuerzo y una dedicación que no siempre dan los frutos que querríais. Es un momento esencial para vuestro futuro, el futuro de los jóvenes: hay que dar un paso que para algunos no es fácil, y que es clave en la vida profesional de cada uno de vosotros.
A menudo, se ve al Bachillerato como un final, pero este final, como tantos, va ligado a un inicio. En vuestro caso, con el inicio de una etapa muy diferente que os planteará nuevos retos tanto a nivel personal como, sobre todo, a nivel académico con el paso a los estudios universitarios.
El esfuerzo realizado durante el Bachillerato, el tiempo invertido estudiando para la selectividad, todo tiene una recompensa. Así pues, podemos responder a la pregunta que mucha gente se plantea sobre la necesidad de los famosos “viajes de final de curso”: son el premio al esfuerzo y a la dedicación en forma de experiencias, y en un futuro próximo, de recuerdos.