Un año más, Neway BCN tendrá Puntos Lilas en sus viajes de fin de curso

¿QUÉ ES EL ACOSO SEXUAL?

Acoso sexual es “cualquier comportamiento verbal, no verbal o físico no deseado de índole sexual que tenga como objetivo o produzca el efecto de atentar contra la dignidad de una persona o de crearle un entorno intimidatorio, hostil, degradante, humillante, ofensivo o molesto”.

 
El acoso sexual incluye una serie de agresiones que van desde molestias verbales hasta abusos serios que suelen involucrar actividad sexual. Se considera una forma de discriminación ilegal por razón de sexo que se expresa en forma de abuso sexual y/o psicológico.
 
Cuando se ocasionan agresiones sexuales suelen ser claramente rechazadas y castigadas socialmente por gran parte de la población, pero no podemos decir lo mismo del abuso psicológico, que suele ocurrir desapercibido o considerarse de menor importancia. Pero, de hecho, algunos psicólogos y trabajadores sociales opinan que el acoso sexual severo o crónico puede tener los mismos efectos psicológicos que la violación.
 
SÍ QUE ES ACOSO SEXUAL CUANDO, POR RAZÓN DE SEXO:
  • Te hacen tocamientos, rozamientos o acorralamientos no deseados.
  • Te han mostrado o reproducen contenidos pornográficos o con un carácter sexual que tú no deseabas.
  • Te hacen gestos obscenos y miradas hacia tu cuerpo que sientes intimidatorias por su carácter sexual.
  • Te envían mensajes con contenido sexual que te ofenden o te hacen sentir mal.
  • Te hablan o preguntan sobre habilidades o gustos sexuales sin que tú hayas invitado a hacerlo.
  • Te hacen bromas sexuales, comentarios en tono de broma que encuentras ofensivos, o de tipo sexual que consideras obscenos (físico, ropa, etcétera).
  • Te presionan para quedar, aunque tú ya has dejado claro que no te apetece.
  • Invaden tu espacio físico reiteradamente cuando tú no quieres.
  • Te hacen bromas o comentarios sexistas habitualmente.
  • Se dirigen a ti de forma ofensiva.
CUANDO ENTRAN EN JUEGO EL ALCOHOL Y LAS DROGAS…
“Julia tiene calculado que en un trayecto de un minuto entre la pista de baile y la barra de bar de la discoteca pueden llegar a tocarle el culo hasta tres veces. Eva y Ruth han desarrollado su mecanismo para ahuyentar babosos: besarse entre ellas para hacerse pasar por lesbianas y que las dejen en paz. Ray se ofreció a acoger a su grupo de fiesta a unas chicas que estaban siendo asediadas por unos desconocidos y acabó insultada y amenazada de ser golpeada. Eli, cuando su amiga se marchó al lavabo, fue rodeada por tres chicos que no hacían caso de sus evasivas, fue magreada en las caderas y quedó traumatizada. Y Sira debe jugar el papel de antipática para hacer de espanta-chicos cuando sus amigas han bebido más que ella.”
 
Estos son alguno de los testimonios recogidos en Barcelona que dibujan la realidad de una noche de fiesta.
 
De hecho, según la última encuesta de violencia machista en Cataluña (2017), el lugar en el que se producen más agresiones sexuales son los espacios de ocio. La estadística apunta a que uno de cada tres tocamientos sexuales con violencia se dan en un lugar de ocio.
 
La violencia en grado diverso puede darse en cualquier ámbito, pero cuando entran en juego el alcohol y las drogas, los agresores suelen percibir mayor confianza en sí mismos y mayor vulnerabilidad en las víctimas, lo que suele aumentar e intensificar las agresiones.
 
POR ESO DESDE NEWAY BCN…
Se han establecido los PUNTOS LILAS. Estos estarán conformados por una persona que se encargará de recoger todas las consultas referentes a situaciones de acoso sexual para poder dar indicaciones según la situación vivida y los protocolos establecidos. Además, dará una respuesta de rechazo a todos aquellos comportamientos hostiles para favorecer la construcción de un espacio de ocio seguro.
 
Aunque se habla mucho de ello, la mayoría de formas de acoso sexual no son totalmente visibles: a menudo las víctimas no denuncian, no se sienten capaces de compartir la situación con su entorno más cercano o incluso no identifican lo que han vivido como una agresión. Por eso es muy importante tomar conciencia y entender que no denunciar y mirar hacia otro lado motiva al agresor a repetir su comportamiento con otra persona y podría, incluso, llegar a intensificarse al percibirse más fuerte al haber salido impune de las anteriores agresiones.
PROTEGERSE Y PROTEGER EMPIEZA POR DENUNCIAR.